Por ejemplo cuando me deslumbras al verte, pues cada día te veo más bella que en nuestra primera cita. Podemos estar en la disco y observo como rechazas la mano de otros hombres, esperando que yo llegue a bailar contigo. Los minutos se hacen cortos cuando hablamos, siendo de noche y sin importar la hora, te ingenias la manera de llamarme, pues sin el beso de las buenas noches me conllevaría a un indudable desvelo. Sencillamente uno no mide los riesgos cuando actúa influenciado por el amor, pero estando juntos nada malo puede pasar, esto hoy lo agradezco y si es necesario dar la vida para estar contigo, así será. Cuando dices que estaremos juntos por toda una eternidad, no sabemos lo que pueda pasar, pero es tu convicción al hablarme la que genera en mi seguridad y tranquilidad. En la salud y en la enfermedad, creo que es una gran etapa, pero tu haz sabido conocer mi cuerpo y aquellas veces que he sido más vulnerable tus caricias auxiliadoras no tardaron en llegar. Si no encontrara el camino, sé que serias capaz de esperarme el tiempo que fuese necesario para llegar a ti. Son estos detalles y muchos más los que me convencen cada día que eres tú la mujer con la cual quiero estar. By: Güstav Rc’mor