El significado de la navidad esta en cada uno de nosotros. En el núcleo de las familias católicas (con el debido respeto a todas las creencias religiosas) nos han inculcado que navidad es una temporada para compartir en familia, para revivir las circunstancias en las que nació el hijo de Dios. Jesús hecho hombre, sin haber nacido, tuvo que experimentar las mismas situaciones a las que nosotros no somos ajenos, una de ellas es el rechazo, cuando la Virgen María y José, tocaban puertas para tratar de que el nacimiento del Niño Jesús se diera en condiciones aceptables, las puertas que tocaban no fueron abiertas. La verdad que era una situación muy lamentable, y creo que ese sentimiento lo comparten con mayor intensidad las mujeres que son madres. La Virgen María y José no se quedaron a la espera de que alguien les brindara una mano amiga, ellos continuaron su camino y se sintieron afortunados con lo que encontraron. En la actualidad podemos decir que realmente no contaban con absolutamente nada, pero ellos en medio de la dificultad valoraron su estadía en ese sencillo pero tan acogedor pesebre, porque el calor de un hogar no se halla en una edificación o en lo que tengamos, el calor de un hogar se halla en el amor de quienes lo integran.
Hoy el nacimiento del Hijo de Dios, es un hecho memorable que trasciende en el tiempo, y que nos permite comprender lo afortunados que somos. Tal vez en esta temporada no vamos a vivir lo que ellos vivieron, pero si esta en nosotros ser muy agradecidos por tantas bendiciones que Dios nos da, porque a pesar de que el hombre haya rechazado al hijo de Dios, Dios y su Hijo siempre están dispuestos a escucharnos, a brindarnos la mano amiga que no recibieron de nuestra parte, siempre van a estar dispuestos a abrirnos la puerta cuando tocamos. Dios es amor, y especialmente en esta temporada nuestra misión es brindar amor y ser felices! ¡Así que vamos a cumplir nuestra misión!
Feliz navidad a ustedes y cada una de las personas que conforman sus familias! Dios nos continúe Bendiciendo y que el Divino Niño Jesús nos enseñe a diario de su nobleza. Un fuerte abrazo. By: Güstav Rc’mor