Desde un principio mi mirada fue tímida, no contaba con un guion para hablarte, sin embargo la vida se empeñó en acercarnos. Aclaro que cada decisión que tomé la hice teniendo como consejero a mi corazón. Sé que no gustabas de mí y aunque tu desconfianza fuera persistente, tu mirada pudo ver más allá, ella se dio la oportunidad de observar mi interior y logró convencerte que mis sentimientos por ti son sinceros. Si tu vida corriera peligro no dudaría en salvarte, mi vida es lo más valioso que puedo entregar y por ti lo soportaría todo lo entregaría todo. Cada palabra que sale de mi boca es porque la siento, no pretendo aparentar ser quien no soy, ni contigo ni con nadie. Soy quien ves, soy tan espontaneo que cada minuto que comparto contigo se adhiere a mí y si no estás me deshago. Este es un juego como muchos pero que no tuvo perdedores, este juego de amor tuvo dos vencedores, tu fe y mi perseverancia que se materializan en un amor verdadero.
By: Güstav Rc’mor